Cipreses

Cipreses, tuyas, enebros, sabinas.

Descripción: Se trata de árboles o arbustos de hoja perenne que les otorgan un aspecto de siempre verde; las hojas pueden ser aciculares o escuamiformes, dispuestas en espiral, opuestas o en verticilos trímeros. Los conos masculinos son pequeños y escamosos; los estróbilos (femeninos) generalmente son globosos u ovoideos, con escamas concrescentes, planas o peltadas. La fructificación puede ser leñosa (gálbulos) o carnosa (arcéstida).


Ecología y distribución: Las Cupresáceas, en Andalucía Oriental, incluyen numerosos géneros y especies que forman parte de la vegetación natural o cultivadas como ornamentales. Entre las cultivadas, cabe destacar los cipreses, que bien como árboles o setos, son frecuentemente utilizados en parques y jardines públicos y privados. Como especies autóctonas propias de bosques y matorrales mediterráneos se encuentran los enebros y las sabinas que altitudinalmente se distribuyen desde las costas de Granada y Almería hasta las zonas de alta montaña, como Sierra Nevada, Sierra de Baza, Sierra de Cazorla, etc.


Floración: La época de floración varía de unas especies a otras, lo que determina que se sucedan varios períodos desde el mes de octubre hasta abril o mayo. La mayoría de los cipreses florecen entre enero y abril, mientras que los enebros y sabinas lo hacen durante el otoño.

Morfología polínica: Polen inaperturado o ulcerado, heteropolar, con simetría radial; circular en visión polar; esferoidal. Tamaño de pequeño a mediano (D= 15-30 micras). Abertura de tipo úlcera situada en el polo distal, irregular y difícil de apreciar al m.o. Exina muy delgada de 1-2 micras que con frecuencia se rompe en dos valvas para dejar salir el contenido polínico. Téctum completo; superficie psilada a debílmente granulada. Como ornamentación aparecen pequeños orbículos espinulosos dispuestos irregularmente.

Alergenicidad: En Europa este polen no fue considerado como alergógeno hasta los años 70, debido a que aparece en invierno y su sintomatología podía confundirse con el resfriado común. Desde entonces se ha observado un incremento considerable de las polinosis debidas a ciprés, sobre todo en las zonas donde estas plantas se usan como ornamentales. En Granada en un estudio realizado en 1996 entre la población atópica revela que el 7% presenta sensibilidad a este polen; entre la población infantil representa el 5%, siendo llamativo que más del 50% de estos niños proceden de Granada capital, conocida como "la ciudad de los cipreses". Jaén presenta más del 20% de casos de polinosis debidos a este polen. Almería es la provincia que muestra la frecuencia más baja de alergia, siendo de tan sólo el 1%.

Estacionalidad: Los primeros registros polínicos comienzan a detectarse de forma intermitente desde el mes de octubre permaneciendo en el aire hasta abril, sin embargo su presencia en el aire es altamente significativa desde enero hasta marzo. Generalmente es febrero el mes que registra las concentraciones estacionales más importantes. Este polen es especialmente importante en la ciudad de Granada donde alcanza niveles extremadamente altos durante los meses de enero a marzo, observándose un fuerte incremento de estas concentraciones en los últimos años.

ESTACIONALIDAD: valores promediados

Almería Granada Motril Jaén