ESTUDIO DE LAS TÉCNICAS EDILICIAS DE LA CASA DE LA CAÑADA HONDA DE ITÁLICA (SANTIPONCE, SEVILLA). EL USO DEL OPUS TESTACEUM

STUDY OF CONSTRUCTIVE TECHNIQUES IN CAÑADA HONDA HOUSE OF ITALICA (SANTIPONCE, SEVILLA. THE USE OF OPUS TESTACEUM

Rafael ROLDÁN VÁZQUEZ*

Resumen
La Casa de la Cañada Honda se corresponde con una de las domus ubicadas en la ampliación adrianea de Itálica. Este nuevo sector se construye para magnificar la ciudad italicense, creando enormes edificios como las termas, el anfiteatro, el teatro o el Traianeum. Uno de los aspectos más interesantes son las diferentes técnicas constructivas empleadas en los edificios, predominando el uso de ladrillo. Son diversas las técnicas edilicias empleadas, centrándonos únicamente en el uso del opus testaceum.

Palabras clave
Itálica, Casa de la Cañada Honda, técnicas edilicias, opus testaceum, tipología latericia.

Abstract
The House of the Cañada Honda corresponds to one of the domus located in Hadrian’s extension. This new sector was built to magnify the city of Italica, creating enormous buildings such as the baths, the amphitheatre, the theatre and the Traianeum. One of the most interesting aspects are the different construction techniques used in the buildings, with brick predominating. The building techniques used are diverse, but we will focus only on the use of opus testaceum.

Keywords
Itálica, house of Cañada Honda, construction techniques, opus testaceum, laterite types.

1. INTRODUCCIÓN

La ciudad de Itálica se establece como un punto estratégico para el control de la producción de aceite y de las diferentes minas ubicadas alrededor del sur de la Península Ibérica (GARCÍA y RODRÍGUEZ 2016: 225-243). Por otro lado, se convierte en el lugar de origen de dos emperadores, Trajano y Adriano (CABALOS et al., 1999: 29-31). Estos factores son los responsables de que, desde el siglo I a.C. hasta época adrianea, se produce un constante interés por engrandecer la ciudad. Para ello se construyen diferentes edificios públicos de carácter monumental como fueron el Traianeum, las Termas Mayores y las Termas Menores, el anfiteatro o el teatro.

Por otro lado, encontramos una serie de domus de carácter señorial. Presentan unas características similares, ocupando una o dos insulae. El esquema de las viviendas es similar, variando pocos factores. En general constan de una entrada principal, a la cual se accedía desde el cardo maximo. En este mismo lado de la vía se encuentran una serie de tabernas, destinadas a diferentes producciones. La primera estancia que se encuentra al entrar en la vivienda sería el vestibulum, el cual daría paso al peristylum. Alrededor del patio central se ubicarían las diferentes estancias privadas y las semiprivadas, como los triclinia. Todas las casas se encuentran parcial o totalmente construidas con ladrillos, empleando la técnica del opus testaceum, siendo la más utilizada en las diferentes viviendas, aunque no la única. Otras formas constructivas documentas en la ciudad son el opus caementicium, utilizado principalmente para las cimentaciones, o el uso de mármoles, entre otras.

Con el desarrollo de esta investigación se ha pretendido realizar un estudio para esclarecer cuáles fueron las técnicas constructivas empleadas en una de estas viviendas, denominada como la casa de la Cañada Honda. La domus es realizada en época adrianea, con la ampliación de la ciudad, teniendo una vida que durará hasta finales del siglo III d.C. o principios del siglo IV d.C. según los estudios realizado por Álvaro Jiménez en 2016 (JIMÉNEZ 2016: 170-182). En definitiva, la historia de la casa no es muy duradera, aunque existen varios aspectos que pueden ser de especial interés. Entre ellos podemos destacar los diferentes replanteos o reformas realizadas, las fases constructivas de la vivienda, la funcionalidad de las estancias documentadas o la composición y procedencia de los ladrillos estudiados.

2. HISTORIA DE LAS INVESTIGACIONES CASA DE LA CAÑADA HONDA

La casa de Cañada Honda se encuentra al este del Traianeum, situada en una pequeña ladera (Fig. 1), por lo que para la construcción de la domus se debieron usar terrazas, como sucede en las tabernas del decumano, situadas a una cota más baja respecto a las ubicadas en el cardo maximo. No está excavada en su totalidad, conociéndose dos tercios (CABALLOS et al., 1999: 84-85). Las primeras intervenciones en la casa fueron realizadas en 1970 por Luzón Nogué, cuando se excava la mitad de la domus y la mayoría de las tabernas. Posteriormente fue abordada por Jiménez Sancho entre 2006 y 2007, quien excava la parte del ambulacrum y completa el peristilo, siendo de los primeros en estudiar la estratigrafía de la vivienda, fechando el abandono de la domus entre finales del siglo III y principios del IV, como se ha citado anteriormente (JIMÉNEZ 2016: 170-182). Por último, se realizaron diferentes estudios en una de las tabernas y la zona norte de la casa por parte del profesor Rodríguez Hidalgo y su equipo (HIDALGO et al., 2018).

Fig. 1. Ubicación de la Casa de la Cañada Honda (Conjunto Arqueológico de Itálica).

Una de las peculiaridades de esta casa es que tiene tabernas anexas a su entrada, que dan hacia el cardo y en la zona sur, a un decumano, siendo poco común entre las domus de Itálica. Esto es debido a su cercanía al templo de Trajano, que se situaba en esa misma calle, por lo que se convertiría en una de las más transitadas. Algunas de estas tabernas fueron utilizadas para preparar el reciclado de materiales, como el mármol, o para la elaboración de objetos de terracota, lucernas, vidrio o hueso. Respecto a la morfología de la domus, presenta un acceso tripartito en recodo, que da hacia un vestíbulum. Desde el vestibulum se entraría al peristylum, de nuevo con una entrada tripartita. El peristylum consistiría en un patio columnado, manteniéndose en algunas de sus zonas el revestimiento de estuco. En la zona central encontramos un estanque, y anexo a este un stibadium. En la parte sur del patio se documentó un ninfeo en forma de exedra. En la zona derecha de la entrada encontraríamos las estancias semiprivadas como la cocina o el triclinium. Las estancias privadas se sitúan detrás del peristylum que serían las que quedarían por excavar y las estancias anexas a la exedra están ya excavadas. El stibadium, citado anteriormente, es uno de los elementos que más interés ha suscitado, situándose en la zona central del peristilo. Debido a la forma en la que está, se interpreta como una construcción posterior a la de la casa, ya que se encaja en el hueco donde se encuentra, entre el estanque y el espacio porticado (HIDALGO et al., 2018).

La técnica empleada en la construcción de los diferentes muros que contiene la domus es el opus testaceum. Es la única tipología constructiva presente, siendo el ladrillo de tipo lidio el predominante en la mayoría de las estructuras. Se utilizan también los ladrillos de cuarto de círculo, destinados a la construcción de las columnas del patio porticado que rodea al peristilo. Los que se encuentran en la basa presentan en la cara externa una terminación de pico (ROLDÁN 1988: 133-135). Las medidas de ladrillos estudiados en la Casa de Cañada Honda son de 28-30,5 x 20-23 x 5-7 cm. También encontramos algunos que oscilan entre los 15 x 20-23 x 5-7 cm correspondiendo con ladrillos de tipo lidio divididos en dos para situarlos en los extremos de los paramentos. Al tener un rango de medidas similar pudieron provenir de un mismo alfar o que el propietario de la casa mandara realizar a distintos alfares producciones similares para una mayor rapidez en la construcción (BUSTAMANTE y PIZZO 2018: 117).

La tipología latericia corresponde con la 5.2 de Diarium, el tipo 6 de Lauberheimer o con un semilydion de la tipología de Righini (ROLDÁN 2008: 754). Esta tipología latericia es documentada por Lourdes Roldán en la casa de la Exedra, con las mismas medidas. Se ubican en zonas del peristilo, en el muro del euripus, en el triclinium, en las habitaciones adyacentes al este y en la zona del cryptopórtico (ROLDÁN 1991: 303-311). También documentó estas mismas medidas en la casa de los Pájaros, en la de Hylas, la de las Tabernas y en la del Planetario (Roldán, 1988, pp. 128- 132). Estos tipos de ladrillo también se utilizan de manera habitual en la Bética, documentándose en las termas Munigua (ROLDÁN 1999: 198), en las de Carteia, Baelo Claudia (ROLDÁN 1987: 106-109) o en ambas termas de Itálica (ROLDÁN 1993: 107-132).

Respecto a las técnicas constructivas empleadas para la construcción de las diferentes casas sí encontramos algunas variaciones. Son 3 las técnicas documentadas por Roldán en su estudio (ROLDÁN 1988). El opus testaceum es la técnica que más se emplea, documentadas en las diferentes domus. Es utilizado para los paramentos de mayor calidad, los cuales corresponden con las estancias más lujosas. Otros muros se realizan con un núcleo de opus caementicium, el cual se reviste de ladrillo, como ocurre en la Casa de la Exedra. También observamos muros realizados con una base de piedras medianas y grandes y la zona superior conservada realizada con ladrillos, visible en la Casa de Hylas o la del Planetario. Por último, los muros realizados empleando la técnica del opus testaceum son los que más se repiten en las diferentes domus estudiadas, documentadas en todas las casas.

Otra diferencia notable es la cimentación. En la Casa de la Cañada Honda observamos que la cimentación de los paramentos se realiza con ladrillos, ya sean fragmentados mezclados con piedras y argamasa o con materiales latericios enteros. En el resto de las casas se han documentado cimentaciones de piedras con argamasa, en algunas ocasiones con sillares o con una base de opus caementicium. Por último, las medidas de los ladrillos estudiados por Roldan oscila entre los 28-30 x 21-23 x 5-6 cm. Estas medidas son las mismas que nos encontramos en los materiales latericios estudiados.

3. ANÁLISIS CONSTRUCTIVO DE LAS DIFERENTES ESTRUCTURAS

Para la realización del estudio de las diferentes estructuras se ha utilizado una planimetría de la domus, utilizando la numeración de las estancias que ellos mismos signaron (Fig. 2). En ella se ha dividido las zonas de estudios en diferentes sectores, concretamente 3. El primer sector se correspondería con las diferentes tabernas documentadas. El segundo consistiría con la zona del vestibulum y el peristylum. El tercero abarcaría las estancias de uso semiprivado. Por último, se realizará el estudio de las diferentes estancias privadas.

Fig. 2. Numeración de las estancias de Cañada Honda.

El principal interés radica en los diferentes paramentos que presenta la casa. Se identifican tres paramentos diferentes, correspondientes con los muros perimetrales, que rodean la casa y el peristilo los muros de delimitación, y los muros de separación de las estancias. En ella se estudiará la tipología constructiva de los muros, la tipología laterecia que presentan, la disposición de los diferentes ladrillos y las medidas de los mismos, entre otras cosas. Por otro lado, encontramos una serie de estructuras como pueden ser los hornos y mostradores de las tabernas, las columnas del peristilo o los pavimentos de las diferentes estancias. La metodología de estudio empleada será la misma que para los diferentes paramentos, realizando variaciones dependiendo de la necesidad del análisis constructivo.

3.1. Sector 1: Tabernas

La casa de la Cañada Honda destaca por la presencia de tabernas tanto en el sector que se corresponde con la zona que da al decumano, como ocurre en el resto de las domus de Itálica, y en la zona del cardo maximo. Este hecho se da también en la casa de las tabernas. El significada de que los puestos comerciales se ubiquen en ambas partes de la casa radica en su localización. La cercanía de la vivienda respecto al Traianeum ocasiona que fuera una de las calles más concurridas de la ciudad, lo que provoca que se explote este factor, siendo 11 el número de tabernas que se documentan. Son diferentes los productos que en ellas se vendía o se fabricaban conocidos a través de los trabajos realizados por Luzón (LUZÓN 1982) o los realizados por Yolanda Peña y Clara Tello (PEÑA y TELLO 2020). En las tabernas se documentan el trabajo de diferentes materiales como el vidrio, el hueso o la reutilización de mármoles, entre otras cosas.

Respecto al análisis constructivo de las diferentes estancias, correspondientes con las tabernas II, III, VI, VII, VIII, X, XII, XIII, XVI, XVII y XXIX, se observan diferentes aspectos que son de interés, como las estructuras documentadas. Todos los paramentos estudiados se realizan utilizando la misma técnica constructiva, es decir, el opus testaceum. La disposición de los ladrillos es variada. Entre ellos se ha documentado muros con ladrillos dispuestos a tizón, otros que alternan una hilada a soga y otra a tizón, otras que alternan hiladas a soga y tizón sin ningún tipo de orden y, por último, hiladas que alternan material latericio dispuestos a soga y tizón. Esto provoca que la anchura de los paramentos varíe, encontrando un rango de medida que va desde los 39 cm de algunos muros de separación hasta los 55 cm correspondientes con los paramentos perimetrales de la vivienda. Para su construcción se emplea una tipología latericia común, correspondiente con los ladrillos de tipo lidio. Las medidas documentadas abarcan un rango de medida desde los 27-30,5 x 20-23 x 5-6,5 cm. Algunos de ellos presentan una medida menor debido a que se encuentran recortados. Son colocados en diferentes hiladas, aunque no presentan una disposición clara, encontrándonos algunos de ellos en los laterales de los muros o a lo largo de las diferentes hiladas.

Las estructuras que se encuentran son diversas. Entre ellas se documentan una serie de hornos, diferenciando dos tipos, uno de planta circular y otros de planta cuadrangular. El hecho de que los hornos se encuentren muy arrasado provoca que su estudio sea complicado. Analizando los hornos de planta circular se documentan ladrillos de tipo lidio, todos ellos recortados para poder darle la forma circular. Respecto a los hornos cuadrangular se emplean de nuevo ladrillos de tipo lidio, pero en este caso completos. El horno que se encuentra en la estancia III presenta un orificio en la esquina sureste, posiblemente para expandir el calor por la estructura.

Otra de las estructuras que encontramos son diversos mostradores. De nuevo se emplean los ladrillos de tipo lidio para su construcción, en este caso dispuesto a soga, teniendo una anchura de alrededor de 20 cm. En las estancias III, VIII y en la número XIII se documentan diversos canales de desagüe. El correspondiente con la estancia número III presenta una dirección que va de oeste a este, desembocando en el decumano. Los correspondientes con las estancias VIII y XIII tienen una dirección de norte sur, desembocando en el cardo maximo. Para su construcción se emplean ladrillos de tipo lidio, encontrándonos algunos recortados, a modo de pared del canal y otros completos, utilizados como techo. En la estancia número VIII (Fig. 3) se documenta una pileta construida con ladrillos y revestida con una capa de mortero hidráulico. Esta taberna estudiada por Yolanda Peña y Clara Tello la interpretan como una zona de producción de perfumes.

Fig. 3. Foto proporcionada por el Proyecto de Cañada Honda de la Universidad Pablo de Olavide (HIDALGO et al. 2017).

3.2. Sector 2: Vestibulum y peristylum

Las zonas del vestibulum y del peristylum consistirían en las estancias públicas de la vivienda. Desde la entrada de la domus se podría visualizar parte del patio central y con ello la decoración que tuviera. Respecto a los paramentos que en estas estancias se documentan, la tipología constructiva es de nuevo el opus testaceum, utilizando los ladrillos de tipo lidio en todas las estructuras, con el mismo rango de medidas que se citan en los muros de las tabernas. Respecto al acceso principal se documentan a ambos lados de la entrada dos elementos decorativos. Consiste en dos lesenas, una situada a la derecha de la entrada en la que se conserva el plinto de la basa, basa, y fuste, estando la cimentación soterrada. La otra se sitúa a la izquierda de la entrada, encontrando solamente el plinto de la basa, y la basa, estando el resto perdido. Las lesenas están adosada al muro de fachada de la domus. La base está conformada con ladrillos de tipo lidio, pero presentan una forma triangular en los lados externos, conformándose únicamente por dos hiladas. La basa está conformada por ladrillos de tipo lidio, pero en esta ocasión, los remaches externos serían con forma de medio triángulo, compuesta por una única hilada. Ambas medidas de las lesenas son las mismas por lo que podemos suponer que son ladrillos encargados y no tratados en un momento posterior. Por último, el fuste está compuesto por ladrillos de tipo lidio, colocados una hilada a soga y otra a tizón. La lesena izquierda está realizada con la misma técnica y decoración, perdiendo en este caso el fuste, como ya se ha citado anteriormente. La entrada da acceso a un vano tripartito, encontrándonos uno central y dos laterales de menores dimensiones. En la unión de los accesos laterales con el central se documentan dos pilares de una envergadura considerable.

En la zona de tránsito que va del vestíbulo al peristilo de nuevo se realiza con un acceso tripartito. Respecto al patio central, se encuentra conformado por una serie de estructuras que se diferencian del resto de estancias. A modo de descripción, el peristilo (Fig. 4) se conformaría por un espacio porticado, encontrándose el espacio abierto en la parte central. La separación de ambas partes consistiría en una serie de intercolumnios, ubicando entre ellos columnas que sujetarían el espacio porticado, siendo 16 en total. Serían 4 las situadas en los lados oeste y este y 6 situados en los lados largos. La tipología constructiva es la misma empleada en todas las estructuras, es decir, empleando la técnica del opus testaceum. Consistiría en una cimentación formada por ladrillos de tipo lidio. La base está formada por tres hiladas de ladrillos, de la misma tipología, en este caso recortados haciendo que los lados de la columna sean de menor tamaño. Respecto a la base tendría la misma tipología que la empleada en las lesenas de la entrada a la domus, es decir, la cara externa terminaría en cuña. En este caso, en vez de realizarse con ladrillos de tipo lidio se emplean ladrillos de cuarto de círculo. Estos mismos ladrillos empleados en la base se utilizan para realizar el fuste de la columna, aunque la terminación exterior en este caso es lisa. No se conservan las mismas partes en todas las columnas, siendo el máximo alcanzado hasta 3 hiladas en el fuste. Todas se encontrarían revestidas con dibujos de distinta índole, no habiéndose conservado ninguno.

Fig. 4. Foto proporcionada por el Proyecto de la Cañada Honda de la Universidad Pablo de Olavide (HIDALGO et al. 2017).

Los intercolumnios se construyen a modo de separación entre el espacio techado y el que se encontraría a cielo abierto. No tendrían una altura muy elevada, siendo la máxima la que se muestra en la foto. Se realizan utilizando la técnica del opus testaceum, empleando los ladrillos de tipología lidio. Algunos de ellos se encuentran recortados, dispuestos de manera intencionada para cerrar la hilada en los extremos. La disposición de los ladrillos enteros es de soga y tizón, sin encontrar ningún tipo de orden establecido, alternando ambas disposiciones en las diferentes tongadas. En las primeras hiladas los ladrillos se amoldan a la cimentación de las columnas y posteriormente a la base de la misma. La longitud de los intercolumnios es de alrededor de 2,40 m. Como última estructura diferenciadora entre el patio central y la zona techada están los pretiles. Estos se encuentran situados en los intercolumnios, aunque son pocos los conservados. Se conforman por una única fila de ladrillos de tipo lidio, en la zona central del intercolumnio, siendo el alzado máximo conservado de dos hiladas.

Los peristilos suelen ser una de las zonas de las domus que suscitan más interés, debido a que poseen elementos decorativos que destacan, no siendo menos el que tenemos en la casa de la Cañada Honda. Son varias las estructuras que nos encontramos, como un estanque central, el stibadium varios canales de desagüe y una exedra. Este último consistiría en un paramento curvo con algunos ladrillos recortados, colocados intencionadamente, a modo de pavimento. Encima de este, encontramos lo que se ha interpretado como un podium. Este estaría compuesto por 4 hiladas de ladrillos recortados y enteros, estos últimos fragmentados por el deterioro. Se apoyaría tanto en el muro perimetral del peristilo como en la zona de pavimento. La funcionalidad de esta estructura podría ser la de servir de base a una escultura. Justo detrás encontramos un derrumbe, probablemente del muro curvo de la exedra. Este derrumbe se encuentra realizado en ladrillos y con una capa de mortero de un grosor considerable, mucho mayor que el usado para trabar los materiales latericios. El hecho de que se emplee tal capa, podría interpretarse para aligerar el peso de alguna estructura contigua, posiblemente la de una cúpula en semiesfera, aunque no está conservada ni encontramos ningún otro derrumbe que lo corrobore, siendo una hipótesis.

Respecto al estanque, se encuentra realizado empleando la técnica del opus testaceum, utilizando ladrillos de tipo lidio trabados con mortero de cal y piedras pequeñas. Algunos de estos ladrillos se encuentran recortados, no sabiendo la disposición real debido a que la mayor parte de la estructura se encuentra revestida, posiblemente con elementos pictóricos decorativos. La zona central está revestida por una capa de mortero hidráulico. Encontramos un orificio en la esquina sureste que podría servir de desagüe, siendo dos los canales expulsarían las aguas restantes. Uno está situado en la esquina sureste y otro en la zona central de la parte este. Los canales presentan la misma tipología constructiva que los descritos anteriormente, aunque en este caso todos desembocan en el canal que se dirige hacia la estancia XIII. Por último, es el stibadium la estructura que suscita más interés, el cual es estudiado por Rafael Hidalgo Prieto (HIDALGO et al. 2018).

3.3. Sector 3: Estancias semiprivadas y privadas

Las estancias de uso semiprivado se corresponden con los triclinia, la posible cocina y los patios secundarios. La tipología constructiva de los muros junto con los materiales latericios empleados son los mismos. En este caso encontramos algunos paramentos que suscitan un cierto interés. Uno de ellos es el que separa las estancias XIV y XV. Consiste en un muro de separación, aunque en este caso la calidad del paramento es muy baja. Se conforma de ladrillos de tipo lidio dispuesto a soga y tizón sin ningún tipo de orden. En la estancia número XV se documenta un pavimento diferente al resto compuesto por ladrillos de tipo bipedalis (Fig. 5). Son los únicos que se documentan en toda la domus pudiendo significar que esta estancia tuviera una mayor importancia. Otro de los paramentos a destacar consistiría en los ubicados en la estancia XX, cuyos ladrillos se encuentran recortados, posiblemente para colocar algún tipo de estructura, como una escalera, aunque no se conserva. El problema que encontramos en estas habitaciones es que no se conservan ningún tipo de estructura que nos ayude a esclarecer que funcionamiento tenían, realizando simplemente hipótesis a raíz de la ubicación de las mismas.

Fig. 5. Pavimentación y muro sur de la estancia XV (HIDALGO et al., 2017)

Si se encuentran mejor documentados los patios secundarios. Consistirían en dos espacios ubicados en la zona oeste de la domus. A ellos se accedería por un acceso tripartito, con las mismas características que los descritos anteriormente. Están conformados por unos estanques, con unas dimensiones menores al descrito en el patio central. De estos estanques partirían unos canales de desagüe dirección oeste-este en dirección al peristylum. Debido al estado de conservación de estas estructuras no podemos analizarlos de manera más detallada.

4. DESCRIPCIÓN DETALLADA DE LOS PARAMENTOS

En este análisis nos centramos en un estudio más detallado de los diferentes paramentos que hemos estudiado anteriormente en la domus escogiendo un muro perimetral, uno de delimitación y otro de separación. Para ellos era necesario que el muro a estudiar tuviera una altura mínima de un metro. De todos los documentados anteriormente, únicamente existen cuatro muros que cumplan este requisito, de los que hemos elegido tres, correspondiéndose dos de ellos al mismo paramento situado en diferentes estancias. El primero en analizar es el muro norte de la estancia IX, posteriormente el muro norte de la estancia XIII y por último el muro oeste de la estancia XX. Como ya se ha citado en la metodología, nos centraremos en tres aspectos.

En un primer análisis, se realizará un cuadrado de un 1 m2 en el que se contabilizarán los ladrillos. Con ello podremos saber si ahorraban más o menos materiales en los diferentes muros. En segundo lugar, se localizarán los diferentes ladrillos recortados. Con ello podremos saber cómo trabajan las cuadrillas. Por último, hemos analizado las medidas de las tongadas en siete lugares diferentes a lo largo del muro y cuatro hiladas. También se han trazado tres líneas en los paramentos de las estancias IX y XIII en tres lugares diferentes. Con ello podremos observas si existe una nivelación cada cierta hilada.

4.1. Contabilización de ladrillos en 1m2

Las catas escogidas para la contabilización de los ladrillos son en la zona oeste de las estancias IX (Fig. 6) y XX y en la zona central en la estancia XIII En ellas podemos encontrar un rango que va desde los 57 ladrillos a los 61. Se observa como el número de matreriales empleados en cada paramento es similar. El hecho de que todas la domus de Itálica estén construidas en su mayoría de ladrillos y parte de los edificios públicos supondría una gran facilidad a la hora de conseguirlo. Esto pudo provocar que el ahorro de materiales latericios no fuera necesario.

Otro aspecto a tener en cuenta es la coloración de los ladrillos. Gracias a las pruebas arqueométricas realizadas en el laboratorio de la Universidad de Granada pudimos observar que son dos los ladrillos de tipología lidio que se utilizan. Uno de ellos es el de color rojo y el otro los que varían entre los colores beige, blanco y amarillo. Los de pigmentación roja son los menos utilizados, como se pueden observar en las distintas imágenes. El hecho de que existan dos tipos distintos puede ser provocado a que procedían de dos fliginae diferentes. El problema lo encontramos a la hora de estudiar estas fábricas, ya que en Itálica no se han documentado hasta la fecha ningún horno dedicado a la fabricación de ladrillos.

Fig. 6. Contabilización de ladrillos en 1 m2 en la estancia IX.

4.2. Disposición de los ladrillos

La disposición de los ladrillos recortados es diversa, encontrándonos varios a lo largo del paramento. Describiendo los diferentes muros, el correspondiente con la estancia número IX contiene 19 ladrillos recortados. No presentan ninguna disposición organizada, encontrándonos muchos de ellos en una misma hilada. En los paramentos de las estancias XIII y XX (Fig. 7) sucede lo mismo, documentando varios ladrillos recortados en una misma hilada y diferentes zonas del muro. El número de ladrillo recortados en la estancia XIII es de 19 y en la estancia XX de 12. Sí podemos destacar que en esta última estancia encontramos recortes en la zona izquierda y central del paramento, siendo imposible observar la parte derecha debido a que se encuentra revestida. Este hecho puede corresponderse a que no se utilizara una forma ordenada para la realización del paramento. Además, usarían tanto ladrillos enteros como ladrillos recortados, reutilizando y aprovechando todo el material del que disponían.

Fig. 7. Ladrillos recortados en la estancia XX.

4.3. Análisis de las tongadas de mortero

Para realizar las medidas de las tongadas primero se escogieron aleatoriamente 4 hiladas. En ellas se tomaron medidas en 7 puntos diferentes para ver si existe una cierta regulación. Posteriormente trazamos 3 líneas en diferentes hiladas y en 3 zonas distintas del paramento para ver si existe una nivelación cada 10 hiladas (Fig. 8) Debido a que las medidas de las tongadas son variadas y que las trazadas presentan medidas diferentes podemos interpretar que existe una constante nivelación de las diferentes tongadas. Esto podría significar que hay una vigilancia de un arquitecto que lo supervisara lo que provoca que esta interpretación sea poco creíble. Posiblemente la nivelación fuera cada cierta hilada, pero al no tener el paramento completo y la altura no es muy elevada esta pudiera encontrarse en una altura no conservada. En el paramento de la estancia XX no podemos realizar el trazo de las 3 líneas en 10 hiladas diferentes ya que la altura del mismo no nos permite esta observación.

Fig. 8. Medidas de las tongadas de la estancia XIII.

5. CONCLUSIONES

Unas de las características que diferencian la Casa de la Cañada Honda del resto de las domus es la técnica constructiva empleada. Observamos como en la casa de nuestro estudio utiliza en todos los paramentos únicamente el ladrillo, mientras que en el resto de las viviendas combinan en algunos muros el uso de piedras en la base y de ladrillos en el resto de la estructura, entre otras técnicas citadas anteriormente. También vemos que la cimentación es diferente. Mientras en Cañada Honda se usa el ladrillo, en el resto de las domus se emplea el opus caementicium o las piedras de mediano tamaño trabadas con argamasa. Uno de los aspectos que cita Roldán en su artículo (ROLDÁN 1988) es la diferenciación de los muros de mayor calidad, donde se emplean mejores materiales, de los de peor calidad. Podemos observar que en nuestra domus no existe esta diferenciación utilizando ladrillos en todos los paramentos. Por último, vemos que los materiales empleados tienen las mismas medidas. Sería interesante ver si los componentes de los materiales constructivos son los mismos que los documentados en nuestra vivienda.

Para nuestro análisis nos hemos basado en una recopilación de algunos estudios realizados en diferentes aspectos, ya citados anteriormente. Con ellos hemos conseguido realizar un análisis paramental e intentar interpretar la funcionalidad de las diferentes estancias, encontrándonos muchas de ellas ya estudiadas. En otras circunstancias, las técnicas constructivas empleadas podrían ayudar a datar un yacimiento o parte de él, aunque en nuestro caso la datación es bien conocida. Sí observamos las diferentes remodelaciones que ha sufrido la casa, las cuales intentaremos nombrar.

Con el adosamiento de los diferentes muros hemos conseguido ver diferentes fases constructivas y el proceso de construcción del edificio. Una primera fase consistiría en la realización de los muros perimetrales de la domus, los cuales imbrican entre sí, y el peristilo. En una segunda fase se habrían realizado los muros de delimitación, siendo simétricos en todas las zonas de la vivienda. Por último, se habrían construido los muros de separación, definiendo así las diferentes estancias de la vivienda.

Como en todas las domus existen espacios de uso público, semi-público y privados. Con la recopilación de los diferentes trabajos realizados, la orientación de las estancias y las estructuras analizadas hemos intentado agrupar la funcionalidad de todas las habitaciones. Respecto a las tabernas, los estudios de Yolanda Peña y Clara Tello y las excavaciones de Luzón nos han ayudado a saber que se trabajaba en ellas. El hecho de que la vivienda se sitúe cerca del Traianeum, provocaría que el flujo de transeúntes fuera fluido. Algunas tenían relación entre sí, como bien citan Peña y Tello. Es el caso de la estancia III, interpretada como una zona de combustión, posiblemente relacionados con la elaboración del vidrio de la taberna VII. (PEÑA y TELLO 2020; LUZÓN 1982).

Otras tabernas como la II, VI, X, XII, XIII, XVI, XVII y XXIX, nos son imposible de identificar debido a la falta de información y estructuras. Entre ellas estarían la zona de elaboración de terracotas o la que trabaja con los mármoles. Una de las tabernas que más información tenemos es la correspondiente con la estancia VIII. En ella se realizó una excavación en 2017 por parte del Proyecto de Cañada Honda de la Universidad Pablo de Olavide. Se definieron las diferentes estructuras interpretándola como una perfumería.

Con el resto de las estancias tenemos el problema de que algunas se encuentran sin excavar y otras no conservan ninguna estructura. Con ello lo único que podemos hacer es realizar hipótesis con su ubicación y basándonos en el resto de las domus italicenses. Sí tenemos más información sobre el peristilo o de las estancias excavadas, correspondiente con la zona oeste. Respecto al peristilo encontramos varios artículos que tratan sobre él, con lo que únicamente analizaremos las técnicas constructivas de las estructuras. En la zona oeste se documentan espacios privados como son dos patios secundarios, ambos con estanques, y una habitación, posiblemente un dormitorio.

Para el estudio de los paramentos la técnica constructiva empleada es la del opus testaceum. Lo único que varía es la disposición de los ladrillos que lo conforman. Estas pueden ser alternando una hilada a soga y otra a tizón o siendo las hiladas a soga y a tizón sin ningún orden. También encontramos algunos paramentos que en la misma hilada alternan ladrillos a soga y a tizón. Respecto a la tipología latericia son tres los ladrillos documentados, los cuales se emplean en distintas estructuras. El más utilizado es el de tipo lidio empleado en todos los paramentos de la domus. El rango de medidas de estos ladrillos oscila entre los 27 – 31 x 20,5 – 23,5 x 5 – 7 cm. La diferencia de medidas entre una estancia y otra es similar, por lo que pensamos que emplearían un único módulo para la elaboración de los ladrillos de tipo lidio, variando con las otras tipologías latericias. Encontramos en las lesenas algunos ladrillos que presentan una terminación en cuña en la cara externa. De estas últimas tipologías no podemos ver la diferencia de medidas ya que las encontramos en una única estructura.

Otro de los ladrillos empleados es el de semicírculo, utilizado únicamente en las columnas del peristilo. En ellos encontramos algunos cuya cara externa termina en cuña, dotándolo de una forma decorativa. Debido a las numerosas fracturas y que algunas zonas se encuentran revestidas no podemos saber cuál es el rango de medidas. En cada columna se establecen diferentes hiladas de 4 ladrillos semicirculares. No todas las columnas se conservan igual, documentando como máximo el principio del fuste. Estos presentan una pigmentación igual a la de los ladrillos de tipo lidio. Puede ser debido a que la procedencia de estos materiales constructivos sea la misma. Por último, encontramos los ladrillos bipedalis empleados para el pavimento de la estancia XV. El rango de medidas oscila entre los 58-62 x 43,5-46 cm siéndonos imposible saber el grosor de los ladrillos debido a que están soterrados.

Cada tipología latericia presenta una funcionalidad. Como ya se ha citado, los de tipo lidio son los más utilizados en la domus. Se emplean en todos los paramentos de la casa y en algunas estructuras, entre las que encontramos los diferentes canales documentados, los hornos, tanto circulares como de planta cuadrada, las lesenas de decoración, el estanque central del peristilo, la base del stibadium, las piletas de las diferentes tabernas, etc. Los ladrillos semicirculares se emplean en todas las columnas del peristilo, aunque en algunas de ellas se haya perdido por el nivel de arrasamiento. Los bipedalis únicamente los encontramos en el pavimento de la estancia XV, aunque no podemos descartar que se hubiesen empleado en otras estancias como ya se ha citado anteriormente.

Otro de los aspectos que hemos tenido en cuenta y que se ha abordado a lo largo de este trabajo es la localización de la domus, la cual se encuentra situada en una vaguada. Debido a este factor, encontramos diferentes niveles de uso, siendo la cota más alta las estancias que se encuentran al norte y la más baja las situadas al sur. Los muros que se sitúan dirección sur- norte mantienen un ancho similar, variando entre los 53-55 cm. Existe una única excepción, correspondiente con el paramento que separa las estancias XIV y XV. En cambio, los muros situados de este a oeste presentan unas dimensiones variadas, que abarcan desde los 37 cm a los 55 cm, siendo así el rango de medidas más amplio.

Centrándonos ahora en la fase constructiva, vemos como todos los muros perimetrales miden 55 cm, menos el paramento correspondiente con la fachada norte. La medida de este muro se toma desde una zona reconstruida, midiendo 53 cm, siendo el paramento real 2 cm más ancho. El alzado de la reconstrucción se retranquea con el muro original. En los muros de delimitación de nuevo observamos como el ancho de sus paramentos es de 55 cm. Solo en los muros de separación situados de este a oeste son los que presentan medidas inferiores, siendo los de norte a sur de 55 cm. Siguiendo con estas observaciones sobre el desnivel existente, encontramos en la esquina sureste una estructura casi cuadrangular que podría corresponder con un contrafuerte. Con todo ello podemos concluir que los muros situados de norte a sur presentan una anchura mayor para soportar el peso provocado por el desnivel de la vaguada, actuando de contrafuerte.

Todo ello se aprovecha para realizar el sistema de canalizaciones. Vemos que la dirección de todos es de oeste a este y de norte a sur desembocando la mayoría de estos en el decumano sur, aprovechando la pendiente de la vaguada. Esto puede ser debido a que el agua provenía desde el oeste, situándose en esa zona las Termas Mayores. Las primeras estancias en recibir agua serían las que se corresponden con los estanques secundarios. Desde ahí avanzaría hacia el peristilo principal y por último se desecharía el agua sobrante hacia las tabernas. Para la construcción de estos canales se emplean ladrillos de tipo lidio fragmentados a modo de paredes y enteros a modo de techo o cierre. Todos los canales se realizan de forma intencionada, es decir, se dejan en los paramentos los espacios para su construcción. Esto provoca que a la hora de realizar el muro se hubiera pensado antes en su localización.

Las otras estructuras de la domus se encuentran en mal estado de conservación o se han reconstruido parcialmente. Son varios los hornos documentados, siendo de dos tipologías diferentes. Son 3 los que presentan una planta cuadrangular y solo uno tiene una planta circular. También encontramos una serie de mostradores, ánforas y una pileta, situados en distintas tabernas. A destacar son las estructuras que tendrían una función más privada. Entre ellos encontramos el stibadium, el estanque principal del peristilo, los otros dos estanques secundarios y la exedra con el podium.

Para finalizar este trabajo nos centraremos en dilucidar que construcciones se corresponden con remodelaciones posteriores. Para estos muros hemos documentado que se emplean la misma tipología latericia, pero su calidad es inferior. Se encentran trabadas con un mortero de poca cal y gran cantidad de arena. Entre ellas, podemos interpretar como construcciones posteriores al cegamiento entre las estancias VI y el vestibulum. Este hecho podría significar que la estancia VI, en un primer momento correspondiese con una estancia de la domus y posteriormente se reconvirtiera en taberna. Otro de los muros serían el que separa las estancias XIV y XV. Se aprecia de nuevo que la calidad de este no es buena. También encontramos que se ha realizado con una única fila de ladrillos, dispuestos de manera arbitraria. Encontramos recortes en los ladrillos de la estancia XX, pudiendo corresponderse estos con el expolio de materiales latericios, aunque solo se observa en la mitad del paramento. Este hecho podría corresponderse a un rebaje posterior para cualquier finalidad constructiva. Del stibadium sabemos que se coloca en un momento posterior a la construcción de la casa, aunque esta construcción se explica de manera detallada en el artículo de Rafael Hidalgo Prieto, ya citado anteriormente.

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* Universidad Pablo de Olavide | Universidad de Granada. rafaroldanvazquez@gmail.com https://orcid.org/0000-0001-7151-5851