PRESENTACIÓN

El período de 6 meses que cubre este número de la revista, de enero a junio de 2025, será recordado como uno de los más convulsos que han seguido a la toma de posesión de un Presidente de Estados Unidos. La alteración de las reglas del juego democrático en el ámbito interno era previsible, aunque quizás no tanto los atentados contra el Estado de Derecho y la ofensiva generalizada contra las instituciones, desde la universidad a los tribunales, en las que se había fundamentado tradicionalmente la sociedad norteamericana. La perplejidad inicial y la debilidad con la que el sistema de garantías constitucionales está respondiendo a esa ofensiva resulta extraordinariamente preocupante.

En el ámbito global, Donal Trump está demostrando que es un excelente generador de caos, inestabilidad e inseguridad. En estos meses ha amenazado con distinta intensidad a los aliados de Estados Unidos (desde la propuesta de anexión de Canadá o Groenlandia hasta los aranceles más arbitrarios contra la UE o Japón, pasando por la denegación de ayuda a Ucrania) mientras ha elogiado a sus rivales (como en el caso de Rusia) y se ha frenado con china, su principal competidor, ante la demostración de firmeza que este país ha mantenido frente a Estados Unidos. Su política frente a la guerra de Ucrania es errática, mientras que ha respaldado activamente a Israel y la masacre que este país está causando en Palestina.

Si hubiera que expresar de alguna manera los sentimientos que produce esta convulsión global en cualquier persona que crea en los valores que se proclaman en los Tratados europeos o en las constituciones nacionales de los Estados miembros, podríamos decir que esta situación puede herir gravemente su sensibilidad: el mundo produce hoy mucho dolor. Ver a la Comisión Europea y a algunos Estados miembros alinearse con los sectores más radicales de la extrema derecha en la negación de la masacre que se está produciendo en Palestina no nos inspira mucha confianza sobre el futuro del proyecto de integración europea. Una Europa ciega y sorda frente al sufrimiento humano, incapaz de reconocer un retroceso civilizatorio y de actuar en consecuencia no es lo que la ciudadanía europea merece.

Hemos llegado, sin duda, al punto más bajo del proyecto de integración europea desde que comenzó. Lo es por lo que se refiere a la incapacidad de actuar frente a las injusticias globales. Pero también lo es en cuanto al sometimiento a las condiciones que el Presidente de Estados Unidos está imponiendo a la UE y a los Estados miembros tanto por lo que se refiere a la defensa militar (la fingida aceptación del aumento al 5% del PIB del presupuesto militar ha sido tan innecesaria como perturbadora) cuanto en la rendición incondicional frente a los aranceles impuestos por D. Trump.

Una rendición desoladora en el fondo y también en la forma. Admiramos a la Presidenta de la Comisión Europea cuando reivindicó, hace unos años, el respeto institucional que se merecía en la reunión con el Presidente de Turquía y, por el mismo motivo, lamentamos que no haya exigido el mismo respeto para su posición como representante de la Unión Europea en la firma del acuerdo sobre aranceles.

Los países que se han negado a aceptar las presiones de D. Trump han mantenido, como ha ocurrido en el caso de China, India o Brasil, su dignidad nacional frente a las erráticas y absurdas pretensiones del Presidente de Estados Unidos. El precio que tengan que pagar es algo que se verá en el futuro, aunque, de momento, no está siendo muy elevado. Quienes han optado por el servilismo, la adulación y la rendición incondicional sin molestarse siquiera en intentar oponer una estrategia inteligente de defensa, le están haciendo pagar un precio muy alto a su ciudadanía.

Mientras tanto, habrá que seguir luchando por una Europa digna, que se respete a sí misma y que se haga respetar en un mundo cada vez más conflictivo y problemático. Una Unión Europea que esté realmente comprometida con los valores que la inspiran y que no los invoque solo de manera oportunista para oponerlos frente a según qué rivales o enemigos. Que sea consciente de que avalar los retrocesos civilizatorios y la ostentación de poder de dirigentes populistas que pretenden sustituir las normas por su voluntad arbitraria en el contexto internacional no es compatible con el ideario europeo.

La parte monográfica de este número “Inteligencia Artificial y Derecho Constitucional”, incorpora diversos textos sobre Inteligencia Artificial. No podía tener mejor apertura que el trabajo de Juan Francisco Sánchez Barrilao sobre “El impacto de la inteligencia artificial en los procesos democráticos”, tanto por la temática como por el autor del texto, uno de los más relevantes especialistas en sociedad digital e inteligencia artificial. Le sigue el estudio de Gabrielle Bezerra Sales Sarlet y Fábio De Holanda Monteiro sobre “Inteligencia artificial y depresión: un nuevo escenario y camino hacia la efectividad del derecho humano y fundamental a la salud mental” que analiza el uso de la inteligencia artificial como herramienta auxiliar en el diagnóstico y el tratamiento de la depresión. Por último, el de Vincenzo Desantis sobre “Soft law, inteligencia artificial y medicina: algunas cuestiones para reflexionar” aborda la cuestión esencial de la ordenación de la inteligencia artificial desde la perspectiva de las fuentes del Derecho.

La Sección de Artículos comienza con un trabajo que enlaza con esta última temática, aunque desde una perspectiva muy diferente, de Lorenza Violini y Daniel Camoni Rodríguez “El sistema de fuentes del Derecho entre Estado y Comunidades Autónomas y Regiones. Perspectivas comparadas a partir de los modelos territoriales de España e Italia”. Su hilo conductor, que agradezco mucho a sus autores, es la publicación de la nueva edición de mi libro Fuentes del Derecho, por el CEPC (a Lorenza Violini le agradezco igualmente su participación en la Presentación del libro en la Universidad de Milán en 2023). Una obra que ha sido objeto de estudios sustantivos similares en el libro coordinado por Antonio D’Atena Las fuentes del Derecho treinta años después. Estudios con motivo de la nueva edición de "Fuentes del Derecho" de Francisco Balaguer Callejón (CEPC, 2022), editado por la Fundación Manuel Giménez Abad en 2024.

Con la temática objeto de este artículo enlaza el texto de Greta Massa Galerano, “Relaciones intergubernamentales y dinámicas de cooperación en los estados descentralizados. Una comparación entre España e Italia”, una cuestión que está centrando cada vez más el debate doctrinal y político tanto en Italia como en España, especialmente por lo que se refiere a las dificultades que se están produciendo en los últimos tiempos. Por último, cierra esta Sección el texto de Ilaria Roberti sobre “La naturaleza constitucional del procedimiento de revisión de los Tratados europeos. Estudio sobre el reciente recurso al artículo 48 TUE” en el que la autora propone un replanteamiento de la naturaleza del procedimiento de revisión de los Tratados.

La Sección de Perfiles y Noticias da cuenta de la Inauguración, el 23 de enero de este año, del Centro de Investigación Peter Häberle de la UNED en Madrid, dirigido por la Profesora Yolanda Gómez Sánchez. Junto con el de Granada y el de Brasilia, este Centro ha sido creado mediante Convenio entre la Fundación Peter Häberle y la UNED y, como explica Daniela Dobre, nace con el objetivo de convertirse en un referente internacional en el estudio del pensamiento constitucional contemporáneo, inspirado en la obra del jurista alemán Peter Häberle. Durante los días 23 y 24 de enero, el Centro de Investigación Peter Häberle de la UNED celebró, tras el Acto de Inauguración en el que participaron distinguidos juristas de diversos países, un Congreso Internacional sobre “Perspectivas constitucionales de la regulación de la Inteligencia Artificial” con la participación de destacados especialistas.

En la Sección de Textos Clásicos se incluye un trabajo de Oliver Lepsius: “¿Necesita el derecho constitucional una teoría del Estado? Una perspectiva alemana: de la teoría del Estado a la teoría de la forma del poder” en la que el autor aboga por superar las limitaciones de la teoría del Estado y sus insuficiencias metodológicas por medio de una teoría de la forma del poder. La Sección de Jurisprudencia contiene un texto mío sobre “La transformación del derecho a la salud en un derecho global a través de la perspectiva one health” que tiene su origen en la Ponencia general impartida en el XXII Convegno nazionale di Diritto sanitario “Corti supreme e One Health. Vent’anni di giurisprudenza” celebrado en Alessandria, los días 21 y 22 de octubre de 2024. La versión italiana de este texto se ha publicado en Italia por Renato Balduzzi, Director del Congreso.

La Sección de Legislación, dirigida por María Luisa Balaguer, incorpora referencias a diversos textos europeos relacionados con la Inteligencia Artificial, los derechos de los trabajadores, políticas de empleo, mejora de las condiciones laborales en plataformas, así como la lucha contra la violencia de género. Por su parte, el Foro incorpora un texto mío relacionado igualmente con la Inteligencia Artificial: “La regulación digital europea en el nuevo contexto global”.

Por último, en las noticias de libros hay dos recensiones. La primera de ellas, realizada por Augusto Aguilar Calahorro en relación con el libro Direito e Cultura: Diálogos desde a América Latina e a União Europeia, D.F. Guimarães, L. Mariz Maia y M.C. de Araújo Borges (dirs.), NUPOD, Campina Grande, 2024. La segunda, de Miguel Azpitarte Sánchez sobre Writing Constitutions. Volume II: Fundamental Rights, Wolfgang Babeck y Albrecht Weber (eds.), Springer, 2022.

En este primer semestre de 2025 nos dejó, el 18 de abril, el gran constitucionalista italiano Alessandro Pace. Vocal del Consejo Asesor de nuestra revista desde su fundación, colaboró con nosotros en varios números. También se publicaron en la revista recensiones de los Scritti in onore di Alessandro Pace, preparadas por Paloma Biglino y por Dian Schefold, así como la recensión de la recopilación de escritos suyos Per la Costituzione. Scritti scelti, Vol. I y II, realizada por Francisco Bastida. Además de un jurista excepcional, era una persona afable y elegante, con una inteligencia muy refinada. Estuvo muy vinculado al grupo académico de la Universidad de Oviedo y especialmente a Francisco Bastida que contribuyó a difundir su obra en nuestro país.

En el apartado de agradecimientos debemos mencionar a la editorial Thomson Reuters y la Fundación Peter Häberle. También, en el ámbito nacional al Proyecto de Investigación PID2019-106118GB-I00 “La configuración del espacio público en las redes sociales y su incidencia sobre la democracia pluralista y la constitución”. En el ámbito europeo, a la Cátedra Jean Monnet “ad personam” de Derecho Constitucional Europeo y Globalización, al Proyecto Jean Monnet "The constitutional bases of Europe: building a common European constitutional culture" y a la Cátedra Jean Monnet “Integration of asylum-seekers and refugees in the European Unión”.

Catedrático de Derecho Constitucional. Catedrático Jean Monnet ad personam.