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PÓRFIDOS “GIGANTES”: DISTRIBUCIÓN Y CARACTERÍSTICAS
GEOTECTÓNICAS |
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Más de la mitad de los 25 pórfidos de Cu
conocidos más grandes del mundo (en contenido de Cu total), se formaron
durante tres periodos: del paleoceno al Eoceno, del Eoceno al Oligoceno y del
Mioceno Medio al Plioceno. Además, estos están concentrados en tres áreas:
Chile Central, Norte de Chile y suroeste de Arizona-norte de México. Suelen concurrir en muchos de estos
depósitos una tectónica compresiva, corteza engrosada y altas tasas de elevación
y erosión. Así mismo, el magmatismo asociado suele ser en la mayoría de los
casos calco-alcalino, aunque hay también algún caso de magmatismo
calco-alcalino alto en potasio (Figura 32). En lo que se refiere a los 25 pórfidos que
contienen más oro (que no todos son “pórfidos de Au”), se concentran
fundamentalmente en el suroeste del Pacífico y en Suramérica. El magmatismo
al que se asocian es mayoritariamente calco-alcalino, aunque los tres mayores
depósitos lo hacen a magmatismo calco-alcalino alto en potasio (Figura 33). En la formación de estos pórfidos de
gigantes en los últimos 20 Ma en la zona circun-pacífica, parecen concurrir
las siguientes circunstancias tectónicas: subducción de dorsales asísmicas y
de cadenas de “montes marinos” debajo de los árcos de islas o arcos
continentales. En algunos casos, estas perturbaciones tectónicas se infieren
que están asociadas a la constitución de una subducción plana, engrosamiento
cortical, levantamiento y erosión, magmatismo “adakítico”. Además,
características tectónicas similares parecen que también ocurrieron en el
Norte de Chile durante el Eoceno-Oligoceno y el suroeste de Estados Unidos
durante el Cretácico-Paleoceno. Así mismo, hay que hacer constar que
sistemas de despegue profundos, fallas lístricas sinsedimentarias, y fallas
profundas de desgarre también son factores muy importantes en la formación de
grandes pórfidos (Figura 34) |
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Pregunta: ¿Qué tipo de subducción sería mas
propicia para la formación de pórfidos gigangtes? |
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Bibliografía fuente: Cooke et al. (2005) Gow y Walshe (2005) |