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SINOPSIS
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Psicópata
y asesino en serie son dos términos inicialmente distintos pero que
pueden confluir, en su caso más extremo, en un mismo sujeto. Esto es,
un psicópata no tiene por que ser necesariamente un asesino en serie
–tan sólo un tanto por ciento ínfimo de ellos va a tener tal
consideración-, pero es bastante común en la práctica que un asesino
en serie reúna parámetros o caracteres de un psicópata –una mayoría
de éstos padece algún tipo de psicopatía-. La
propia naturaleza empírica e interdisciplinar de la Criminología hace
necesario el estudio de dichos sujetos con el fin de prevenir y actuar
contra los hechos delictivos más comunes que, en el caso de la psicopatía,
pueden conducir a cualquier tipo de conducta delictiva –dependerá del
grado de desarrollo del trastorno de la personalidad-, desde una simple
violación de la norma social cuya sanción puede que no exista o tenga
una relevancia mínima, hasta comportamientos lesivos de bienes jurídicos
de especial relevancia, tales como la vida, la integridad, la salud
(...); o en el asesino en serie una acción final que es la muerte de la
víctima. Tradicionalmente
se ha asociado la figura del psicópata a la de un individuo carente de
escrúpulos que se dedica a asesinar a otras personas –principalmente
mujeres- con una gran frialdad en sus actos, tanto preparatorios como de
consumación. Sin embargo, pese a que, desgraciadamente, es cierta esa
creencia, es necesario romper con esa idea ya que, aunque no es menos
cierto que los referidos casos en la práctica son muy escasos, y que la
mayor parte de los sujetos que sufren algún tipo de psicopatía no
tienen por qué responder a ese perfil. Estos individuos pueden cometer
cualquier clase de delito –sin tener que ser necesariamente contra las
personas-. Normalmente el tipo de delito a realizar dependerá en gran
medida del grado o de la tipología de psicopatía desarrollada. Por
ello, la línea antes mostrada de creencia popular sobre la consideración
de psicópata se asemejaría más a la de un asesino en serie, ya sea
psicópata o psicótico, que a la de un psicópata a secas en tanto
estos sujetos que presentan un trastorno de la personalidad no van a
conformarse con realizar un único acto delictivo sino que, por sus
caracteres concretos –déficit comportamental, agresividad,
impulsividad (...)- tienden a desarrollar en sucesivas ocasiones dicho
comportamiento delictivo y por consiguiente, si el resultado final
ocasionado es el de muerte, encajan perfectamente en esa terminología.
Si además se logra determinar el motivo que impulsa al asesino en serie
a cometer sus crímenes –organizado o desorganizado- se aportará una
información de primera mano que permitirá transcribir sus principales
rasgos de personalidad y su modus operandi, pudiendo con ello predecir
futuras actuaciones, relacionar sus crímenes y obtener datos de
especial relevancia que puedan acelerar su detención. En
España, afortunadamente, no suelen darse casos de asesinos en serie con
relativa frecuencia aunque sí es verdad que existen cada cierto período
de tiempo –verbigracia José Antonio Rodríguez Vega; Manuel Delgado
Villegas, “el arropiero”; Margarita Sánchez, conocida como «La
Viuda Negra barcelonesa», entre otros-. Cuestión muy a tener en cuenta
si se tiene en consideración que el intervalo temporal en el que suele
ser detenido el delincuente oscila entre uno y dos años y medio. Estadísticamente
es en Estados Unidos donde se presentan los registros más numerosos de
asesinos en serie –psicópatas o psicóticos-. Ello ha obligado a las
autoridades de aquel país a adoptar toda clase de medidas con el único
fin de disminuir el número de crímenes cometidos por estos individuos.
A tal efecto, los avances en esta materia han sido realmente innovadores
y van desde la creación de bases de datos como, por ejemplo, el VICAP
–Violent Criminal Apprehension Program (Programa de Captura de Delitos
Violentos)- que no es otra cosa que un programa creado para evaluar y
relacionar crímenes-; la especialización de determinados agentes del
FBI –profiler-; o la creación del NCAVC –National Center for the
Analysis of Violent Crime (Centro Nacional para el Análisis de los
Delitos Violentos)- departamento específico del FBI para el estudio del
comportamiento de estos sujetos, realizar investigaciones, operar y
asistir dentro y fuera de los Estados Unidos. El caso de los trastornos de la personalidad o psicopatías, excluyendo los supuestos de asesinatos en serie, es bien distinto tanto cualitativa como cuantitativamente en tanto que es algo común en cualquier civilización y aunque genere conductas delictivas no tienen por qué ser agresivas. El principal problema que presentan estos sujetos que ya han delinquido es la imposibilidad de resocializarlos en tanto que no existe en la actualidad un tratamiento satisfactorio. Es decir, el individuo que presenta una psicopatía y comete un crimen será condenado a la pena establecida a tal efecto en el Código Penal –en tanto la psicopatía es un trastorno de la personalidad y no una enfermedad mental- y una vez que la cumpla, salvo casos muy excepcionales, volverá a delinquir por su propia naturaleza. |
SUMARIO
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I. CUESTIONES PREVIAS.- II. PSICÓPATAS.- 1. Teorías, caracteres y tipologías.- 2. Personalidad del psicópata.- 3. ¿Es posible diferenciar al psicópata del resto de la gente?- 4. Diagnóstico y predicción de la psicopatía.- 5. Tratamiento.- III. ASESINOS EN SERIE.- 1. Concepto y clasificación.- 2. Alteraciones mentales y modus operandi.- 3. Características comunes a los asesinos en serie.- BIBLIOGRAFÍA. |