Indicadores Bibliométricos

            

Hasta ahora hemos venido afirmando que uno de los mejores instrumentos para medir la producción científica son los indicadores bibliométricos, que permiten averiguar el impacto  causado por un trabajo científico cualquiera a partir de la literatura científica y tecnológica publicada. Los indicadores bibliométricos permiten manejar, clasificar y analizar grandes volúmenes de publicaciones científicas.

Existe un buen número de definiciones que precisan el significado de estos indicadores [Sancho,1990; Mendez, 1986; Moravcsik, 1989; López Piñero y Terrada,1992] pero hemos elegido la que nos ofrecen Isabel Gómez Caridad y María Bordons Mangas [1996] por parecernos clara, concisa y muy expresiva: “Son datos estadísticos deducidos de las publicaciones científicas. Su uso se apoya en el importante papel que desempeñan las publicaciones en la difusión de los nuevos conocimientos, papel asumido a todos los niveles del proceso científico”.

 La función de los indicadores de actividad científica no puede limitarse a acumular datos estadísticos yuxtapuestos. Hay que integrarlos para conseguir explicaciones cada vez más sólidas relacionadas con la ciencia, en general, y en sus aspectos concretos [Terrada y López Piñero, 1991].

 A partir de los indicadores bibliométricos se pueden precisar una serie de cualidades que, según Rosa Sancho [1990] son:

             -Crecimiento de cualquier campo de la ciencia, según la variación cronológica del número de trabajos publicados en él.

             -Envejecimiento de los campos científicos según la “vida media” de las referencias de sus publicaciones.

            -Evolución cronológica de la productividad científica según el año de la publicación de los documentos.

             -Productividad de los autores e instituciones, medida por el número de sus trabajos.

             -Colaboración entre científicos e instituciones, medida por el número de autores por trabajo o centros de investigación que colaboran.

             -Impacto o visibilidad de las publicaciones dentro de la comunidad científica internacional, medida por el número de citas que reciben éstas por parte de trabajos posteriores.

            -Análisis y evaluación de las fuentes difusoras de los trabajos por medio de indicadores de impacto de las fuentes.

             -Dispersión de las publicaciones científicas entre las diversas fuentes.

 La utilidad de tales indicadores, que ya se ha comentado, es principalmente,  proporcionar información acerca de grandes volúmenes de unidades como por ejemplo publicaciones científicas, de una universidad, etc., siendo menos útil a la hora de proporcionar información con menos volúmenes de datos.

El objetivo de estos indicadores es proporcionar datos cuantitativos sobre el estado de la ciencia y la tecnología con el fin de justificar la inversión de los fondos públicos que el gobierno asigna al desarrollo de la ciencia [Méndez,1986]. Una característica a tener en cuenta de los indicadores es que éstos deben ser objetivos y tienen que reflejar fielmente la idiosincrasia de la comunidad científica que pretende analizar así como la calidad científica de los sujetos sometidos a examen. Lo más acertado es que además vayan acompañados por una serie de indicaciones sobre las inversiones realizadas, tanto en forma de dinero como de recursos humanos.

Para Moed [Moed et al., 1988], los indicadores bibliométricos se ven como una herramienta rentable, principalmente porque dan información cuantitativa “concentrada” sobre la producción (output) y el impacto de esa producción. Además, y a pesar de posibles limitaciones, los indicadores bibliométricos juegan un papel palmario en la toma de decisiones en política científica y en evaluaciones del rendimiento de la investigación. En el caso de la investigación básica o pura hay una considerable evidencia de que los indicadores bibliométricos pueden jugar un importante papel como herramienta de evaluación de grupos de investigación o de científicos individuales [Zachos, 1991].

 

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(c) Elvira Ruiz de Osma. Departamento de Biblioteconomía y Documentación. Universidad de Granada (España)