INTRODUCCIÓN
Las últimas décadas han sido testigo del desarrollo de un creciente interés por el estudio de las bases biológicas de los procesos mentales, y es probable que dicho interés siga aumentando en todo el siglo XXI.
La Psicología Fisiológica es una disciplina de la Psicobiología, área científica que se integra en el campo de las Neurociencias, cuya docencia se ha extendido a la mayoría de las facultades universitarias. El punto común a todas las neurociencias reside en que tienen como objeto de estudio al Sistema Nervioso, aunque cada una de ellas lo aborde de manera específica según sus intereses concretos.
Dado que el cerebro es el sistema anatómico y funcional que controla y dirige la conducta, para comenzar a comprenderla, la Psicobiología debe comenzar por el estudio de la organización y funcionamiento del Sistema Nervioso.
Por tanto, supone un enfoque biológico a la hora de abordar las actividades manifiestas del organismo, así como los procesos internos –aprendizaje, memoria, percepción, motivación, emoción, percepción, etc.- que subyacen a estas actividades.
Dentro de la Psicobiología, la Psicología Fisiológica utiliza un nivel de análisis fisiológico en la explicación del comportamiento humano, integrando y utilizando las aportaciones de diversa índole procedentes de la Psicología y de otras Ciencias Biomédicas. Entiende que el papel del Sistema Nervioso en la conducta debe entenderse en el sentido de una estructura interviniente, no pasiva, susceptible de diversos niveles complementarios de análisis.
Históricamente hablando, la Psicología Fisiológica, ha sido una disciplina situada a medio camino entre especialidades, que recoge dos líneas de pensamiento diferentes:
• Un enfoque teórico, representado por la Filosofía, que ha ido planteando cuestiones teóricas las cuales son tratados experimentalmente por la Psicología y por la Psicobiología desde el siglo XIX, con el método científico.
• Una línea empírica, experimental, representada por las ciencias biomédicas. Se basan en el hecho de que cuando el SN sufre algún daño o modificación, se vé afectada también la conducta. A partir de aquí se establece la relación SN – Conducta, apareciendo así las ‘neurociencias', las cuales se encargan de la primera parte.
De esta convergencia entre líneas teóricas y empíricas, neurociencias y ciencias del comportamiento, estamos obteniendo una nueva perspectiva de la conducta, que amplia nuestra visión al permitirnos percibir nuevas relaciones entre los fenómenos biológicos y los psicológicos.
En el futuro, creemos que el estudio de las bases biológicas de los procesos mentales desempeñará un papel importante en el currículum de las instituciones que formaran a los profesionales de las Ciencias de la Salud, puesto que la psicobiología es el nexo natural entre las humanidades y las ciencias biológicas y experimentales.
Asignatura Troncal de 2º Curso
(9 créditos: 6 teóricos + 3 prácticos)
Curso 2005-2006
Nota: Este curso se imparte según el sistema de créditos europeos (ECTS)