CASA KAUFMANN

0 DE LA CASCADA

Bear Run, EEUU

Frank Lloyd Wright

1935


Acomete esta casa Wright después de grandes acontecimientos personales y de estancias en Europa y en Japón, tras la culminación en 1908 de la casa Robie. El planteamiento que se hace en esta casa tanto en su concepción original como en su elementos tiene mucho que ver con todo ese cúmulo de experiencias y vivencias que pertenecen al arquitecto entrado en la madurez, contaba con 66 años.

Si la lógica de las villas Capra y Savoie es la participación y alteración en beneficio mutuo de la arquitectura y la naturaleza, en este caso la posesión de la naturaleza es su motivación. No la arquitectura que se contrapone a la naturaleza, sino la arquitectura que nace del principio orgánico de la naturaleza, que es naturaleza.

Si en cuanto en la concepción original subyace ese concepto mestizo de comprensión de la relación entre arquitectura y naturaleza, en cuanto a el repertorio particular utilizado necesariamente hay que indagar en la arquitectura oriental tan próxima a la naturaleza albergue de múltiples significados; en las propuestas neo-plásticas del grupo europeo De Stijl, que investigan las masas expansionadas, delimitadas por elementos que virtualmente no cierran espacios; de sus casas realizadas en la primera década del siglo, en donde la vivencia de la casa se hace alrededor de la chimenea, el fuego domesticado, expresado así como elemento simbólico en referencia al núcleo de lo doméstico.

A la casa, que se sitúa sobre una cascada tal como expresa su gráfico sobrenombre, se accede por una escalera que une el nivel inferior con la sala de estar o bien mediante el puente ubicado en la parte posterior y que lleva a la primera planta donde se ubican los dormitorios. Las circulaciones, múltiples, fluidas y aparentemente confusas, hablan de esos vasos multiformes por orgánicos, que nutre la naturaleza y del fluido que las comunica. El espacio interior fluye y el espacio exterior se confunde con la arquitectura que entre claroscuros no muestra exacto su contorno, su dentro y fuera. Con esta magia inaudita propone este edificio su posesión de la naturaleza.