Los efectos de las fuentes internas dependen del isótopo y del tipo de desintegración, de los núcleos hijos que produce, de sus vidas medias radiactiva y biológica, etc. Por esta razón, los criterios de protección radiológica (CPR) para este tipo de fuentes suponen grado de complicación considerable.
En la tabla 11 se muestra una breve relación de CPR para la concentración de los isótopos más comunes en aire y agua (el agua se refiere a cualquier fluido bebible, incluida la cerveza). Como muestra la tabla, los valores de los lımites recomendados cubren varios órdenes de magnitud. Con gran diferencia, el daño biológico debido a inhalación es mucho mayor que el producido por ingestión. Por ejemplo, el lımite recomendado para H (tritio) es cuatro órdenes de magnitud menor en aire que en agua. Esto se debe a que el volumen de aire que el cuerpo necesita es mucho mayor que el de agua, ya que la respiración es continua. Para los isótopos Ar-41 y Kr-86 no se dan concentraciones en agua debido a que son gases nobles y no son solubles.
Isótopo | Exposición ocupacional | Público general | ||
aire | agua | aire | agua | |
H | 0.1 | |||
C | 0.02 | |||
Na | ||||
Ar | * | * | ||
Co | ||||
Kr | * | * | ||
Sr | ||||
I | ||||
Cs | ||||
Ra | ||||
U | ||||
Pu |
Otra caracterıstica importante de las fuentes internas es que pueden ser ``ocasionales'' o ``crónicas''. Algunos individuos (técnicos radiólogos, mineros) pueden estar expuestos a tomas contınuas de radiación (esto es, crónicas). La concentración de los isótopos en sus cuerpos puede alcanzar niveles asintóticos.
Es debido a las condiciones de polución crónicas que ciertos lımites recomendados son expecialmente bajos (por ejemplo, en el caso de Pu-239). Aunque la concentración de un isótopo sea muy pequeña, si reside en el aire que respiramos o en el lıquido que bebemos, entonces su toma es prácticamente continua. Si además el cuerpo es propenso a retener ciertas especies por largo tiempo (por ejemplo en los huesos) entonces, incluso una concentración muy baja puede llegar a producir dosis notables a lo largo de una vida.