Un tóxico, al ser metabolizado, puede originar intermediarios reactivos, que son unos compuestos electrófilos entre los que destacan los radicales libres y los agentes alquilantes. Estas moléculas altamente reactivas pueden actuar:
1.- Uniéndose covalentemente a macromoléculas (ácidos nucleicos, proteínas, etc...)
2-. Produciendo peroxidación de lípidos: conlleva el deterioro de los dobles enlaces de los ácidos grasos poliinsaturados de las membranas celulares.